La importancia de medir y registrar el impacto y progreso de las actividades y el programa nos ayuda a comprobar los beneficios que las artes tienen en la rehabilitación social, y a construir más posibilidades de aplicación de programas artísticos comunitarios con fines sociales.
Juntas podemos hacer que existan cada vez más y mejores programas que nutran la gran labor que miles de organizaciones y mujeres hacen por atender y erradicar la violencia de género en nuestro país.